El Monstruoso Troll

Fue en el receso entre las clases de Ciencias Naturales y Matemáticas que decidí abordar a José Abraham Domínguez Peña...
Iba preparado para una rotunda negativa, como era de esperarse, pero si de sorpresas hablaramos, José Abraham es el maestro de todas ellas,
y yo el ingenuo por excelencia que se creía todo; admirador de la virtud de aquellos altos mentirosos de lenguas ágiles y mordaces...

- ¿Puedo ver tu dibujo? - Le dije.
- Claro, por qué no...Miralo.

José Abraham abrió su cuadernillo de hojas blancas sin espiral, mostrándome la última y secreta de sus creaciones; los trazos a lápiz eran rápidos pero finamente llevados por la mano de un experto en fantasía; un maestro de la mentira colectiva...Todo ese pelambre enredado; la enormidad de sus extremidades y lo pronunciado de sus dientes, me hacían pensar en lo que José Abraham pensaba esa mañana, temprano...durante la clase de Español.

 * Ilustración de Peter Amland

- ¿Qué es exactamente? - Le pregunté.
- Exactamente no es nada, ¿sabes? Cualquiera pudiera tener una interpretación distinta a la mía. Lo que para ti puede parecer como un mono, para otro pudiera ser un extraño hipie de pelo largo. No crees?
- Para mi no es ningún mono, o bueno, no fue lo primero que pensé.
- ¿Y qué fue lo primero que pensaste?
- Bueno, a decir verdad...Aún sigo pensando en lo que es. No estoy totalmente decidido. Creo haber visto uno de esos en alguna película, alguna vez.
- ¿Oh sí?, ¿en qué película lo viste? - Quiso saber un animado José Abraham.


Y así fue como en un instante, pasaba a ser el entrevistado, en lugar del entrevistador. Me devané los sesos para acordarme el nombre de alguna película de fantasía o ficción en donde hubiera salido alguna suerte de...cosa peluda enorme....Pero no me acordaba de nada. Mentirle al maestro de las mentiras y las alucinaciones?, no era una opción. Tenía que salir con algo brillante pero creíble. Me había aventurado más allá de la zona de "regreso seguro"; ahora estaba hundido hasta el cuello; comprometido con una respuesta coherente que me dejara bien parado ante ese individuo engañoso que era José Abraham.

- Ya recordé...Había una película que...
- ¿Había?...¿Quieres decir que ya no existe?...¿Pudieras asegurar que destruyeron todas las copias?
- No, bueno. "Hay"...Una película, con Brad...Nelson y Sigourney...Thomas; que trataba sobre un...Sobre una especie de Troll que atacó una apartada villa en la campiña Noruega. Tenía unos efectos especiales magníficos, para una película de su tiempo, pero lo mejor eran las actuaciones y el suspenso creado por el Director. Me parece que tuvo varias nominaciones, aunque no recuerdo para qué premios.
- ¿En verdad?...Wow
- Sí. Pensándolo bien, creo que tu dibujo se parece mucho a esa criatura. Por eso me preguntaba si...

- A clase! - Llamó el profesor de matemáticas; como una campana salvadora en una pelea de Box Sabatino; como una red que se había extendido debajo de mi y salvándome de caer en el pozo de ácido; como una ponchadura en la llanta del auto, minutos antes de partir a otra aburrida reunión familiar. Ese tipo de sensaciones salvadoras vinieron a mi atormentada conciencia, en una mañana en la que mejor debí dedicarme a mis asuntos.

- Julio, Julio...Saliendo de aquí vamos a la tienda de videos?...Quiero ver esa película de la que me hablaste!

Claro que...Ahora podíamos ir por un round más...O comprobar que la red tenía una fisura por la que podía pasar libremente hacia mi destino...O sorprenderme cuando de la cajuela sacan la llanta de refacción y un gato hidráulico para hacer el cambio correspondiente.

¡Odio a los Trolls!